Los alimentos y la agricultura estarán en la agenda de la reunión de Ministros de Agricultura del G20 que se celebrará en París los días 22 y 23 de junio, cita preparatoria de la conferencia del G20 del mes de noviembre en Cannes, Francia. El movimiento internacional de campesinos La Vía Campesina condena el intento constante de los gobiernos de las naciones más ricas del mundo de apropiarse de las políticas alimentarias, y controlarlas, ya que afectan no sólo a los campesinos sino también a todo ser humano.
El G20 no tiene autoridad para dictar sus políticas al resto del mundo. Incluye únicamente a las 20 economías más ricas y excluye a las más pobres. Por ejemplo, de África, un continente azotado por el hambre, sólo tiene presencia en el club África del Sur.
El G20 no sólo es ilegítimo sino que además es incompetente. Con su intención de construir un nuevo orden económico mundial, el G20 ha intentado, desde su creación en 1999, controlar la especulación y los paraísos fiscales, desmantelar los bancos «excesivamente grandes» e imponer impuestos a las transacciones financieras... Pero estos intentos han fracasado porque los líderes de dichas naciones siguen promoviendo las mismas políticas neoliberales que han creado las crisis alimentarias y financieras actuales. La presidencia francesa del G20 coloca la volatilidad de los precios agrícolas y el desarrollo rural en la agenda del G20.
Los alimentos vuelven a llegar a precios máximos y alcanzan los niveles de 2008 cuando los altos precios elevaron el número mundial de personas hambrientas a más de mil millones, afectando, sobre todo, a las zonas rurales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario