EE.UU. invierte mil millones de dólares
anualmente en las operaciones “humanitarias” en Latinoamérica y el
Caribe de su llamada Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID),
reveló Mark Feierstein, administrador del organismo estatal
norteamericano denunciado por ser una fachada de la inteligencia
norteamericana.
Feierstein, un funcionario federal
con pasado vinculado a actividades de injerencia dijo en Miami que Haití
-donde USAID ha realizado actividades controvertidas- Colombia, México,
Centroamérica y Perú están en “la lista de prioridades” de ese
organismo.
En un momento de exceso de
entusiasmo para celebrar los “éxitos” de esta dependencia del Secretario
de Estado, Feierstein declaró abiertamente que se dedicará “cinco
millones” para la “democracia” en Venezuela este año aunque la USAID se
retiró del país por temor a la ley a Ley de Defensa de la Soberanía
Política y la Autodeterminación Nacional -que prohíbe desde finales de
2010 el financiamiento externo para partidos políticos.
Un “sector muy importante para esa
agencia es el relacionado con la democracia y por ello implementa
programas para el fortalecimiento de las instituciones en casi todos los
países de la región”, justificó sin referencia a la violación de la
ley.
En el caso de Venezuela se destinan
cinco millones de dólares en asistencia técnica para "promover y
proteger la democracia y los derechos humanos", insistió.
“Estratego” de candidato asesino
En el 2002, este jefe regional de
la USAID, especialista de la injerencia, fungió de estratego en la
campaña electoral del ex presidente boliviano Gonzalo “Goni” Sánchez de
Lozada y su Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR). “Goni” fue
quién ordenó la masacre sangrienta que causó la muerte de 67 personas, y
heridas a unas 400 casi todas civiles, durante la denominada ‘Guerra
del gas’, en octubre 2003. Prófugo de la justicia boliviana, radica
ahora en EEUU.
Tan “humanitarios” son los ideales
de Feierstein que fue sucesivamente nombrado en los años 90 como
“Gerente de Proyecto” en Nicaragua, en la operación sucia realizada por
la National Endowment for Democracy (NED), subsidiario de la USAID;
director para América Latina y el Caribe del Instituto Democrático
Nacional, otro instrumento de injerencia imperial subsidiado por la
USAID; y Asesor Especial del Embajador USA en la Organización de los
Estados Americanos (OEA).
El día mismo de la conferencia de
prensa del funcionario norteamericano, el presidente boliviano Evo
Morales denunciaba en su país que Estados Unidos, a través de la USAID,
espiaba “a Bolivia y a otros países latinoamericanos”.
“Estoy convencido que algunas ONG,
especialmente aquellas financiadas por USAID, son la quinta instancia de
espionaje, no sólo en Bolivia, sino en toda Latinoamérica”, acusó Evo
Morales en rueda de prensa en la ciudad de Oruro.
En México, el impacto potencial para Estados Unidos
Con respecto a Colombia y México
Feierstein admite que su organización “presta asistencia en temas de
seguridad”, sin demasiado precisar.
“En México, dijo, la batalla se
libra contra el tráfico de droga”, mientras en Colombia busca
“consolidar sus avances en seguridad”.
"Esos asuntos ahora se han convertido en prioridades para la USAID”, confesó.
En México, dijo, el organismo
estadounidense multiplica las operaciones “porque puede ser grande el
impacto potencial para Estados Unidos cuando hay inestabilidad por la
violencia criminal”.
No habló de la omnipresencia en el
país azteca, confirmada por estos mismos órganos de seguridad, del FBI,
de la DEA y… de la CIA.
La USAID
destina unos 180 millones de dólares a Colombia y entre 50 a 60
millones de dólares a Perú, México, Honduras y Guatemala, según el
funcionario.
"Estamos muy "contentos" con el
progreso que se ha logrado en Haití, dijo al afirmar que "en el área de
la producción agrícola, donde USAID ha estado trabajando con
agricultores” (sic) la USAID “ha podido duplicar, o incluso triplicar,
la producción en los últimos dos años".
Mostró mucho entusiasmo con un parque industrial que se inaugurará en el norte de Haití con empresas norteamericanas.
Sin embargo, evitó recordar que la
USAID, antes y después del terremoto, ha organizado, orientado y
financiado varias de las organizaciones políticas haitianas del país, en
coordinación con la el Departamento de Estado y paralelamente a la
presencia de 10 000 hombres del Comando Sur.
La USAID también jugó un rol clave en el derrocamiento del Presidente Jean-Bertrand Aristide, en el 2004.
En Cuba, donde la USAID gasta sus
millones en operaciones de desestabilización que confía a contratistas,
estos fondos están distribuidos por Mark Lopes, Subadministrador
Adjunto, quien fue “representante personal” del Senador cubanoamericano
Bob Menendez, digno representante de la mafia cubanoamericana en el
Capitolio de Washington, cómplice de cada “iniciativa” legislativa
hostiles à Cuba y Venezuela.
En Latinoamérica, se han señalado
en los últimos años huellas de la USAID en Bolivia, Brasil, Colombia,
Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México,
Nicaragua, Panamá, Perú, República Dominicana y Venezuela.
En múltiples ocasiones se ha
demostrado que la USAID, además de dar cobertura a oficiales de la CIA,
ha reclutado, preparado y financiado elementos que luego se han
manifestado como agentes al servicio de los intereses norteamericanos.
TOMADO DE http://alainet.org/active/55968